jueves, diciembre 18, 2008

Aquél personaje


Es curioso pensar que una persona que no conoces personalmente pueda darte tantas luces sobre tu vida, sobre lo que viene y lo que te espera… incluso, quitarte un poco el miedo o, por qué no decirlo, hasta acompañarte en él.






Me acuesto reflexionando sobre lo que dice y me levanto pensando en qué le diré hoy o cómo me sorprenderá. Ese interés latente por conocer más de esta persona de alguna forma me llena de vida y de motivos para estar aquí… y allá. Quizá nunca llegue a conocerla, pero eso es lo de menos… tal vez se cruzó por mi camino en un instante para irse en un par de días sin decir más, pero ya puedo decir que ha hecho su labor en su paso por mi mundo y quedo con este sabor dulce de saber que existe gente alrededor del mundo que vale la pena mi viaje y mi partida de este país… ojalá a muchos más lugares de los que imagino.






Gracias por hacerme soñar con la conciencia del acontecer, de la impulsividad de la vida misma… hoy soy sueño y conciencia en manos de un destino que parece dispuesto a dármelo todo.

lunes, diciembre 01, 2008

Hubiera


Te hubiera regalado
una gota amarga de mi humor
si hubieses sonreído.

Te hubiera entregado
el olor seco de mi recuerdo mejor guardado
si hubieses insistido.

Te hubiera entregado
el sabor del día en que te imaginé
si hubieses querido continuar.

Te hubiera brindado
el calor de mi lugar predilecto
si hubieses caminado conmigo.

Te hubiera ofrecido
un beso azul
si hubieses puesto tus labios al alcance del mar.

Te hubiera quitado
el destello loco de tus pupilas
si te hubieses regalado.

Te hubiera arrebatado
la felicidad del momento esquivo
si te hubieses entregado.

Te hubiera despojado
del ensueño del amor puro
si te hubieses brindado.

Te hubiera robado
un suspiro frío de desamor
si te hubieses ofrecido.

Si hubieses
te hubiera herido,
pero como soy yo quien hubiera,
el deseo me ha carcomido el sueño vivo.

Si hubieses
te hubiera matado de a poco,
pero al menos,
te HABRÍA amado.

Me voy

En mis manos vacías
reescribo la historia que no me leiste.
En mis labios salados
oigo el murmullo del naufragio que se avecina.
En mis ojos rotos
intuyo el paso al desamor.

Miro mi piel agrietada
y descubro los rasgos de tu caminar
por este cuerpo que alguna vez fue mío.

La resignación sacia mi sed
y tu ausencia es ya una isla perdida
en un mar olvidado.

Te dejo mi materia herida
y me llevo lo que me resta de espíritu.

jueves, noviembre 27, 2008

VISUALIZAR

Mis pies se niegan a enraizarse
en lo que no me fue dado
para hacer manualidades
con los hilos del camino,
del viaje artesanal.

Una mujer de historias vastas
y de manos lectoras,
de pasado humano
y paso firme.

Soñar es el presente del ingenuo,
visualizar,
el futuro del apasionado.

lunes, octubre 27, 2008

Amar o no amar

Me pregunto si habrá formas de amar... me cacome la duda.

Veo constantemente a personas que pasan de uno a otro ser y repiten "Te amo", "te amo", "te amo". Y lo peor del caso, parecen sinceras.

Me pregunto si simplemente habrá gente con capacidad infinita de amar y otra a la que esta capacidad le fue negada o arrebatada de algún rincón del subconsiente.

Me pierdo en mis cuestionamientos y me da miedo encontrar respuestas. Quizá es que no he podido descernir qué es el amor, quizá he amado tantas veces sin haberlo sabido, tal vez sólo una vez fue obsesión... tal vez no, quizá nadie haya amado como yo, o quizá nunca he amado por ser yo.

Sin embargo, miro atrás y a pesar de que todas han dicho amarme, siempre han terminado por pasar por encima mío sin importarles mi sufrimiento... y yo, que digo sólo haber amado a una, siempre he puesto primero el bienestar de la persona que me acompaña. ¿Realmente han amado? ¿He amado?

A pesar de que todas han dicho amarme, lo piensan dos veces antes de disculparse cuando no han actuado correctamente e, incluso, una que otra se ha ahorrado el pedir perdón. Yo, que digo sólo haber amado a una, he pedido y suplicado perdón por una y cada vez que me he equivocado o he causado dolor. ¿Han amado? ¿He amado?

¿Tengo o no la capacidad de entregarme y vivir el sueño que todos desean?

domingo, octubre 26, 2008

Me declaro

Hoy ha regresado ese sentimiento que había vuelto a ignorar... SOLEDAD. Fui feliz, a mi manera... se siente tan bien pensar que no estoy sola, que a alguien le importo de verdad, oir su voz en las noches y en las mañanas, sentir su cuerpo contra el mío cuando el universo nos permitía una noche juntas, ver sus ojos iluminados cuando me hablaba de planes futuros, de viajes, de una vida juntas. Fui feliz, a mi manera...

Sin embargo, hoy vuelve a mí este vacío, esta soledad infinita, este recuerdo de lo que soy al final... una mujer sola, un ser que vive su vida y los demás sólo se quedan hasta que recuerdan que deben partir. Levantarse sola, trabajar sin motivación para que sean las 5:30 p.m. y volver a casa, mirar el msn para ver que a nadie le importa lo que tengas que decir, mirar el celular para repasar nombres y teléfonos a los que no llamarás, dormir sola los fines de semana aunque tengas la casa sola y el día libre, llegar temprano los fines de semana porque todos están ocupados y si acaso te regalan un rato de su vida que para ti vale toda una vida.

Me gusta pensar que no estoy sola, me encanta ignorar la verdad, me enamoro fácilmente de la compañía... que alguien pretenda por un tiempo que le importo, que me diga lo especial que soy, que me hable de lugares a los que nunca me llevará, me haga promesas que nunca cumplirá... Y cuando el inevitable final acontece, esa promesa de un amor parte.

Hoy... hoy el universo me ha traido de nuevo la verdad, esta vez acompañada de desilusión y tristeza. Me pregunto a veces por qué sentir desilusión cuando yo sé perfectamente que volvería aquí. Y siento falta... quisiera que mi teléfono sonara y alguien me deseara una buena noche y un profundo sueño... quizá hasta un excelente día mañana, pero quizá pido demasiado. Lo recuerdo.... fui feliz, a mi manera.

Me gusta pensar que existe un alguien afuera para mí, que las cosas pasan porque así debe ser, que hay algo preparado, que podré compartir mi vida... me gusta. Me gusta cuando lo creo...Qué feliz he sido, a mi manera...

Hoy.... aquí... declaro mi soledad y mi valentía para vivirla como debe ser porque no soy más que esto. Me declaro libre, aventurera y poderosa. Me declaro capaz, superior y valiosa. Pero ante todo, me declaro sola temporal... porque volveré a engañar mi soledad.

Cuán feliz he sido, a mi manera... cuánto he amado, a mi manera... Y lo más importante, cuánto me falta por amar.

lunes, octubre 06, 2008

Te conozco

Conozco la manera en que sonríes
y atesoras para ti un llanto fúnebre
de soledad

Conozco ese hablado fuerte
y hasta cortante
con el que acallas el temblor de tu cuerpo frío
carente de besos ansiosos.

Conozco esa ironía baja,
esa calma contundente
que juega a tejer hilos con el vaivén
de las imparables agujas que se clavan en tu vientre
y sangras...

Conozco tu caminar pausado,
tu mirada firme
y en el fondo de tu alma,
veo la furia encarcelada,
el odio atado,
la ira ignorada.

Te conozco,
y al contemplarte,
este ser impedido
admira el rostro helado
de una mujer que ardientemente ama.

sábado, octubre 04, 2008

El universo respondió
y yo no supe escucharlo.

Ahora sólo temo por mi destino

jueves, septiembre 25, 2008

Buen viaje


Es cierto... llevo mucho tiempo desaparecida, quizá sumida en cuestiones que son típicas de los adultos y que les impide recordar tiempos memorables. La gente corre a mi alrededor, habla constantemente, se afan por las labores del día, que tal cotización, tal número de radicación, que llame allí, que me lleve a la calle 164 con 9, que tengo un paquete urgente Fabio, que me tramite esta ruta Oscar... y después de casi 3 meses la ilusión inicial de empezar mi vida laboral se me ha suicidado de nostalgia al recordar aquellos días en que a las 3 de la tarde podía estar en la carrera séptima tomando un bus hacia mi casa, tal vez visitando a un amigo o simplemente hablando por teléfono sin la supervisión constante de mi jefe.

Soy adulta, pero no mayor... la rutina ha desbancado mi crecimiento personal, mis ganas de robarme el mundo y devolverlo cuando ya lo haya sabido todo e, incluso, han lanzado al olvido mis razones para escribir. Me siento obsoleta. Me siento un ser más del mundo que no da, pero tampoco quita.

Lo que sé: no quiero ser y no seré esto.
Medidas tomadas: viajar a Argentina a principios de febrero aún sin el apoyo económico de mis padres.

Sólo el hecho del viaje me revive la esperanza de volver a sentirme viva, y los miedos que no demoran en venir con comentarios y burlas de algunos carecen de sentido ante los sueños que he reinventado para mí.

!No dudaré en saltar al abismo de lo desconocido!

Buen viaje compañera de angustias, rutinas y noches de cansancio... un nuevo mundo te abre las puertas ante esta decisión que has tomado.



!Buena suerte y recuerda... el fracaso no está escrito para los soñadores que saben el valor de un riesgo tomado!

miércoles, junio 11, 2008

e una
En estos días he aprendido a oírme en el silencio...

Así está bien por ahora.
Ya vendrán otros tiempos...

miércoles, abril 16, 2008

No me atrevo

Vestida de miedo
en el cuarto oscuro de mi melancolía,
te escribo en los besos
que arrojas semidormida cada noche
a la silueta de esa mujer
que hoy no te acompaña.

Te escribo de día
para llenar los renglones
de mi blanco caminar
carente de emociones.

Te escribo de noche
para jugar con la tinta mustia
de estos labios
que ya no reconocen en un beso
el rostro del amor.

Te escribo en mis ratos libres
para calmar al tiempo
que se cuela lento
pero ataca como el predador más hambriento.

Te escribo en mis ocupaciones,
para autorizarme la libertad
y dejarte inscrita en la última tarea de la tarde
que nunca será entregada.

Te escribo constante,
pero sin prisa.
Te escribo con persistencia,
pero sin llanto.

Te escribo, te escribo,
y aún así,
no me atrevo a despojarme de estas vestiduras
para leerte en mi papel de vida.

jueves, marzo 27, 2008

Marzo 27/08


El destino… a veces me gustaría tanto creer que existe, que hay siempre un algo que nos espera sin importar qué hagamos o qué dejemos de hacer. Que simple, pero no estoy segura de querer adoptar una actitud tan facilista frente a la vida. En cambio… lo incierto, lo impensable, lo luchado, lo soñado convierten el hallarse vivo en un desafío, aunque continuar parezca muchas veces un sin sentido.

No estoy tratando de hallar o llenarme de razones para entender por qué sigo aquí, sé muy bien que las razones no bastan para mantenerme en pie cuando la depresión y la tristeza se aferran a mis tobillos hasta derribarme. Se trata más de hallar un sentido profundo a este caminar vacilante, sin dejar de ser torpe. Para algunos funciona la religión, como lo hizo para mi mejor amiga del colegio, Susana. En el colegio no creía en Dios o simplemente no le importaba lo suficiente. Hizo la primera comunión porque aún no tenía la autoridad ni la edad para decir “no quiero”, pero no lo pensó dos veces cuando nos propusieron hacer la confirmación. Sin embargo, allí estuvo presente para acompañarnos a quienes sí queríamos reafirmar nuestra fe; bueno, digamos que por ese entonces la confirmación era para mí, más que un acto de fe, un requisito que debía cumplir para poder casarme más adelante… quizá si hubiese sabido que nunca iba a casarme en una iglesia y vestida con esos ridículos vestidos blancos que hace demasiado tiempo perdieron su significado junto a la virginidad de las novias, no me habría confirmado.

Nos graduamos y Susana se fue a California. No sé qué le hicieron o cómo sucedió, pero regresó asegurando ser cristiana. Desde entonces, en sus consejos nunca sobraron las palabras de Dios, en sus cumpleaños la diversión se volcó a encontrar Salmos y descubrir su significado y sus planes de fin de semana no podían ser en otro lugar que en la Iglesia. Fue así que la vida se encargó de bifurcar nuestros caminos, pues mientras ella clamaba su fe, yo acepté mi gusto por las mujeres. De un momento para otro, para Susana yo me convertí en una pecadora a la que había que tenerle compasión, y ella se transformó ante mis ojos en una persona cerrada, intolerante y poco comprensiva a la que había que huirle antes de que emprendiera su discurso religioso para convencerme por qué yo estaba equivocada y ella SIEMPRE tenía la VERDAD.

Sea como fuere, lo cierto es que a ella le funcionó la religión, no para hallar felicidad completa, pero sí para hacer de esta existencia algo más llevadero. A mi modo de ver, la religión también requiere una cierta actitud facilista frente a la vida, como la creencia en el destino, aunque no sé decir con certeza hasta qué punto van ligados. Si aparece un problema, una tristeza, una complicación… entonces es mejor dejarlo en manos de Dios porque Él sabe por qué hace las cosas, o de pronto es que Dios nos está enseñando algo que debíamos aprender para ser mejores personas y afrontar con entereza todas las buenas cosas que nos vienen. Claro, no se te puede olvidar rezar, rezar mucho para ver si se te hace el milagrito y se te resuelve el problemita… quién nos puede asegurar que si no hubiésemos rezado tanto igual ese problema habría desaparecido. Quedará sin respuesta seguramente mi interrogante, igual siempre he tenido claro que luchar contra algo tan intangible como la religión es un absurdo… en cuestiones de fe siempre habrá respuestas, pero pocas soluciones plausibles.

Religión para unos, yoga para otros, esoterismo para algunos, autoconvencimiento para otros cuantos… y así cada quien parece encontrar su razón válida. Mientras tanto yo continúo escribiendo sin sentidos que no me llevan a nada más que de vuelta a vos, esa mujer que más pronto que tarde se degustará leyendo mis textos para saber cómo debe reescribir mi historia.


A veces me gusta pensar que estás escrita en mi destino… otras cuantas, que vives de alguna forma fuera de mis cuatro paredes y mi desafío es encontrarte para convencerte de que este es tu lugar de llegada, que sin importar cuántos viajes hayas emprendido en el pasado... este es tu destino último.

domingo, marzo 23, 2008

Marzo 23/08

Hoy me siento enferma con la vida y a veces me inclino a creer que es cierto que uno tiende a somatizar la desgracia humana, esa misma de la que ahora soy presa. Gripa, fiebre, dolores intensos en el estómago que me tiran al piso y me incitan a no levantarme más. Cuando pienso en alguna enfermedad posible o me hablan de las diversas formas en que un ser humano puede morir, mi mente inmediatamente lo evoca con una euforia loca, como si desease con todas sus fuerzas mi muerte o, al menos, mi sufrimiento.

No estoy segura de querer morir aunque, de hecho, le temo más a la vida que a la muerte. Sé cuánto puede doler vivir y cuánto peso hay que arrastrar para seguir adelante. Fracasos, sueños a pedazos, decepciones, gente malintencionada, palabras agresivas, sentimientos punzantes, AMOR. Este último ítem sí que me atemoriza, pues después de haberlo visto a los ojos y haber dado la vuelta, nada parece tener sentido.

¿He amado? Claro… a mi perra llamada Crispeta que murió hace poco, a mis padres, a mis hermanos, al gato que nunca tuve, a mis amigos. Amor hay en todos lados, así como odio. El segundo mata, el primero no se queda atrás. Sí, hay amores de amores, ¿el amor hacia una mujer? La droga más adictiva, pero también la más escasa. Todas las mujeres se enamoran, son presa fácil de la seducción y los detalles. Podría ponerme, a mis 23 años de edad, a hacer una lista precisa de qué se requiere para enamorar a una mujer, pero no estaría del todo bien revelarlo a los hombres. Mi voz interior, si es que aún queda un eco de ella, me dice que no debo traicionar a mi género, así que ellos tendrán que descubrirlo por sí mismos.

Ahora, amor, esa es una palabra que no engloba a todas las mujeres. ¿Cómo hacer para que una mujer ame? ¡Qué no daría yo por ese secreto! Me hubiera evitado tantos tropiezos. Lo más curioso es que yo, ni siquiera por el hecho de ser mujer, he podido develarlo. Sin embargo, lo he conseguido unas 3 veces. Aún así, siento mucho que de esas 3 sólo 1 lo consiguió conmigo. Una vez en 23 años es lo que me ha regalado la vida para amar. ¿Privilegiada? Tal vez ¿Suficiente? No. Reemplazar la dosis de pasión desenfrenada por dosis de soledad no es un negocio fiable, menos satisfactorio. Soy una adicta compulsiva de una droga que no poseo y que, quizá, no pruebe en mucho tiempo.
Mientras tanto, mi cuerpo seguirá sufriendo los efectos secundarios de la escasez y mi mente continuará evocando cualquier enfermedad posible que le haga olvidar el verdadero mal.

jueves, marzo 06, 2008

Caminante

Cierras tus labios en un murmullo seco
Y en un grito mudo lloras los besos que crecen
Y corren lejos de ti.

Buscas incansablemente la soledad del huérfano
Y crees que en el desolado rincón del pasado
Hallarás las huellas para volver a casa.

Ignoras que tu hogar no tuvo nunca un presente,
Y allá vas con los ojos anhelantes
Y la mirada perdida.

Pasas a mi lado,
Me miras de soslayo
Y continúas tu camino sin rumbo.

Has dejado tu casa atrás
Y en tu ruta sólo hallarás hoteles de paso.
¡Buena suerte caminante!
Has dejado rezagada otra huérfana más…

lunes, marzo 03, 2008

Sin mí

Un frío despertar lejos de mi esencia,
es la perdición de mi alma en vilo,
es el propio desprecio que crece
y devora la dignidad.

Fui el reflejo de la perfección,
la ejemplar esposa de la ideoneidad,
el paso firme de la corrección,
era yo mi fiel convicción.

Ahora la grieta de humanidad
me expulsa a la incertidumbre del que vivo
teme por su existencia
y se ha perdido en el camino
a la propia idealización.

Soy la crítica de hace pocos años,
la culpa de quienes ya experimentaron
la imperfección
y vieron al final la luz de la compañia real.

Allá están todos ellos,
y yo apenas regreso sobre las huellas
de una infancia que me negué.

Un grito vacío de mí
y el eco de mi esencia se resiste a responder

miércoles, febrero 27, 2008

Serás

Una promesa que me hace el silencio,
otra mentira que fisgonea tras la belleza,
es una silueta de autoengaños
para acallar el tedio de la amargura.

Te miro
para distraer a la soledad,
cierro los ojos
para verte en las líneas de mis manos,
te oigo
para deshacer el aire que muere
cuando no respiras,
te hablo
para traspasar el muro de tu inexistencia.

Inhalo el aroma de tu fina sonrisa
cuando camino cerca del parque que nunca frecuentamos.
Lloro el impulso vano de poseerte en vida
para acompañarte de manos en la muerte.

No dibujes tu figura real,
no acudas a mi mente
para revelarme tu anonimato,
no mientas en la oscuridad del instante,
háblame cuando la luz de tus palabras
haya descubierto el devenir de mi incondicional pertenencia.

sábado, febrero 23, 2008

Al Universo


Me has negado lo que por tanto tiempo he anhelado y sé que eso no puede ser en vano. He sufrido, llorado y luchado por lo que me has hecho inalcanzable. Por fin me he dado por vencida, pero esa derrota es la misma que me brinda ahora el derecho de pedir. Oye entonces mis peticiones:


· La quiero pronto.


· La quiero mía y nunca compartida.


· La quiero resuelta, segura de sí misma, con aspiraciones y proyectos ambiciosos a futuro.


· Que sea sincera y capaz de mirarme a los ojos siempre con la verdad de frente.


· Que se equivoque, pero no tema reconocer sus errores y sepa pedir perdón.


· Que desee una relación seria.


· Que sea soñadora.


· Que brille por su inteligencia y deslumbre por su modestia.


· La quiero hermosa a mis ojos y ante los demás


· La quiero de mirada profunda y abrazos confortantes


· La quiero de corazón puro pero conocedor.


· La quiero de firmes convicciones y viva percepción


· La quiero de besos suaves y sentidos.


· Que sea alegre y tenga buen humor.


· Que sea sociable y descomplicada.


· Que sepa lo que quiere y para dónde va.


· Que haya conocido el amor y esté dispuesta a volver a sentirlo.


· Que tenga pasado, pero haya sabido olvidarlo y quedarse con lo aprendido.


· Que sea madura y sepa mantener el equilibrio entre la razón y el sentimiento.


· Que viva intensamente y tenga una vida entera para aportarme.


· Que sepa conseguir lo que quiere sin acudir a la manipulación.


· Que sea constante y sencilla.

Deseo ante todo, ESCUCHA:


· Que me ame exclusivamente a mí.


· Que esté dispuesta a darlo y dejarlo todo por estar a mi lado.


· Que me valore y me lo diga constantemente.


· Que sepa ver mis falencias y, en vez de criticarlas, me ayude a superarlas.


· Que se convierta en un apoyo incondicional.


· Que aprenda a oírme en silencio y a hablarme sin palabras.


· Que quiera a mis amigos y ellos a ella.


· Que sea adorada por mi familia y se interese por hacer parte de mi mundo.


· Que no tema ser quien es y acepte frente a todos que me ama.


· Que se sienta orgullosa de mí y me lo haga saber.


· Que esté cerca en los buenos momentos y aún más cerca en los malos.


· Que me impulse a seguir cuando esté a punto de caer.


· Que sepa hablarme y llevarme.


· Que me haga sentir especial.


· Que me consienta y me dedique el tiempo necesario.


· Que se levante a mi lado cada día y me mire a los ojos como si fuera el primero.


· Que sea detallista y no me descuide.


· Que me apoye en mis iniciativas y se emocione con mis logros.


· Que me abrace con fuerza y me bese con amor y pasión cada vez.


· Que me desee locamente.


· Que me extrañe cuando esté lejos y piense en mí sin falta.


· Que confíe plenamente en mí y no me cele sin razón.


· Que crea en mis capacidades y me las aplauda.


Pido quizá un imposible, pero simplemente pido lo que quiero, pido lo que creo, me merezco.


Esta es mi petición... te llegó el momento de dar.


La espero pronto... quedo a la espera.



domingo, febrero 17, 2008

Horriblemente sola


7 días enferma creyendo que todo se pasaba con antibióticos y un par de pastillas para el dolor... que ingenua.


Llevo casi 2 semanas pensando en ella. Cuando me enfermé sólo soñaba con un abrazo y su voz en mi oído. La veía frente a mí como solía estarlo hace ya algún tiempo. Casi la tocaba, casi volvía a ser mía... casi dejaba de sentirme tan sola. Pero era sólo un sueño...


Me desperté hoy y puse injustamente mi soledad en manos de esa personita hermosa que amaneció conmigo... me sujeté fuerte, la apreté contra mí como si su presencia bastara para espantar mis ruidos internos. Demasiada responsabilidad para ella, tanta que ni siquiera se tomó el tiempo de comprenderla y huyó por la puerta en la madrugada sin darme tiempo siquiera de despertar mis miedos.


A las once de la mañana finalmente abrí los ojos para hallarme sola... como ayer, como anteayer, como hace 9 meses. Pero todo era costumbre, sólo que hoy me sentía aún más enferma. No quise levantarme de la cama en todo el día y prendí el televisor para silenciar mi llanto. Varias veces tomé mi celular para darme cuenta que no tenía a quien llamar... nadie iría por mí, nadie me cuidaría... cada quien había continuado con su vida esa mañana menos yo. Y aquella que había despertado a mi lado en la mañana estaba ocupada cuidando de otra... alguien que lo merecía mucho más que yo aunque me negara a entenderlo.


Volvió entonces su imagen, su voz, su olor imaginado, pasado... y la sentí justo a mi lado. La soledad me impulsaba a ella... y acudí. Volví a oír su voz... suave, pero firme, con ese acento particular que tenía el poder de enloquecerme o destornillarme de la risa. "Sabía que algo te pasaba" "No he dejado de pensarte" Y así me decía que quizá, sólo quizá, no había estado sola. Pero entonces empezaron las preguntas: "¿Has estado con alguien?" "¿Y tus levantes?" Y yo sólo quería huir y refugiarme en un abrazo sin palabras... que no dijera nada más, que no importara el pasado, el presente, el futuro, las promesas, los estados individuales... sin importar con quien hubiese estado, con quien esté, si va o viene, si mañana volverá a desaparecer como solía hacerlo hace pocos meses. Todo eso hubiese yo dejado de lado por 5 minutos de silencio con ella... sin besos, sin contacto, sin miradas... sólo ella... pero ella continúo hablando "tengo muchas más preguntas por hacerte". Y entonces huí.


Llegué donde una amiga, el plan para salir estaba armado... mi segundo plan de escape. Todo se vino abajo en 10 min... el destino me estaba preparando un cara a cara con mi realidad. Llamó de nuevo "Están diciendo que estás con x persona" "No confíes". Qué poco importaba ya... que digan, que no digan, que callen sus vidas y mueran con ellas. La mía ya está haciendo su labor... me está matando. Y ella seguía sin entender la importancia de su silencio, de su verdadera compañía.


Llama entonces quien ha decidido no cuidarme "Mi sábado ha sido un asco" le digo... "No peor que el mío" responde "Me imagino" "Es sarcasmo?" "Ajá" "qué estés bien" dice y cuelgo yo el teléfono sin decir más, con la presión en el pecho y el peso de hacer daño sin necesidad. "Grita dentro del carro de camino a tu casa" me dice una voz amiga. Por el contrario, me siento en mi carro, prendo el radio y me echo a llorar sin control... el duelo con lo que soy... el destino ha logrado su cometido. Miro al cel varias veces y pienso en llamarla "Acompáñame en silencio" le diría, pero no lo entendería... sus palabras era lo único que ella tenía presente hoy. No deseaba llamarla entonces, era mejor no oírla más, aunque su sola imagen a mi lado me impulsara locamente a abrazarla y desearla en esa silla del copiloto... Cómo extraño su silencio y nuestra elocuencia muda! Cómo la amo sin contacto! Cómo la sueño sin palabras! Cómo la invento y reinvento para mí! Cómo puedo amarla ausente!


Pero ahí seguía... sola... pasaban las horas y no podía mover el carro. "Piensa en algo que desees hacer mucho y hazlo" me dije. Cine... no. Comida... no. Nada lo suficientemente bueno podía ocurrirseme... nada podía llenarme. "Estás sola, horriblemente sola"... me repetía una y otra vez. "Lo siento, lo siento mucho" le dije por el celular. Había querido responsabilizarla durante todo el día de una carga que no le correspondía y ahora lo entendía... era libre entonces de mi odio por hoy y de mi presencia en las madrugadas. Era libre para optar por su pasado y dejar ir lo que no me atreví a brindarle.


Anduve sin rumbo... horas, horas, horas... el radio y yo sin poder retener las lágrimas. Era una máquina que se dirigía a casa sin saber cómo llegar verdaderamente a ella. "Sola, sola, sola". ¿Por qué? ¿Por qué? "Has causado mucho daño", "Has preginado una altiveza miserable para ti misma" "Has caminado sobre los demás" "Te has sobrepasado". Soy miserable, no soy nadie más de lo que he escogido... ser como los demás... humana... escoria. "¿Qué deseas?" Compañía verdadera y real... la vida de ese ser que se niega a llegar unida a la mía... amar sin palabras.


Llego a mi casa sin saber realmente cómo, escribo el inicio de mi verdadera liberación y abro el camino para que mi persona soñada vaya construyendo sus pasos hacia mí. "Perdón... lo siento de corazón"

domingo, enero 27, 2008

Sueños


Me ofrecen la tinta amarga de sus labios
azul veneno,
negra mortífera,
invisible como sus besos,
el verso inconcluso de su cuerpo
que se ha quedado desdibujado
en algún cajón de mi mente,
la estrofa ancha de sus caderas
cuando baila sin mí,
las palabras
que dejará de pronunciar en vida
y me anuncian un mal despertar de la muerte.
Letras de piel
que nunca se han leído en mis manos,
el ritmo de su risa roja
que madura lejos de las raíces
de mi humor terco
y tímido…

Así,
¿cómo podría yo
frágil ante la ausencia
en la que nunca ha estado ella
dejar de sucumbir a sus ofertas?

Bórrenme de lo real
y compongan mi poesía
en su papel de tierras fértiles,
lejanas…

No me abandonen,
no deseo abrir los ojos
para descubrir que mi Dios
se olvidó de escribirla

jueves, enero 24, 2008

Impulso


La vida nace ceñida a dos ojos de llantos abismales,
ajustada a gritos que intuyen la llegada al averno.
Luego es que aprendes a reír en omisión
de tu propia existencia terrenal,
pues dentro guardas pecados que nadie conjetura.
¿Y qué?
Aquí sigues como androide
fingiendo pertenecer al edén de lo impuesto.

Sabes que con una palabra la puesta en escena se desploma,
la marioneta se derrumbará frente a los asistentes al teatro de lo normativo,
y rotas las cuerdas de lo reglamentario
será el hazmerreír de la concurrencia.

De pronto,
en un impulso desenfrenado
abandonas el puerto de gentes comunes
y resuelves zapar en tu bote de dudas de papel.

Tus turbaciones como remos en tu poder
te encaminan hacia lo prohibido.
Visualizas la tormenta en el límite de lo presentable
y persuades a tus convicciones de que las consecuencias no importan ya,
que quizá haya posibilidad de sobrevivir al diluvio.

Te aproximas a gran velocidad,
los relámpagos encolerizados de la sociedad en la sala del juicio te espantan
y los truenos en vilo declaran culpable al nuevo reo.
¡Cadena perpetua al infractor!

Te descubres sola en la celda de lo impronunciable y
tratas vanamente de silenciar al crepúsculo que murmura:
hoy debes suicidarte,
no se te antoja probar el sabor de la diferencia.
Vive para mañana
y tu agonía será el suplicio de un arrepentimiento perenne.

Haz tu elección,
de ti depende el porvenir del nacido defectuoso.