lunes, febrero 19, 2007

Obsesión

El dolor se escurrió entre mis dedos,
el escaso recuerdo dejó de hablarme en las largas noches,
el impulso faltó en sus intentos de provocarme,
el llanto se escondió de mi melancólico mundo,
y las pocas risas se burlan de lo que fui con ella.

Muy poco de mí,
su esencia halló refugio en el vacío,
y fui sólo un halo de ella.

Una corta separación,
y corría de nuevo tras mi falsa alma.

Finalmente el mundo me rinde homenaje,
el aire me devuelve el aliento propio,
vuelvo a reescribirme en el papel.

Va para volver,
huye para aferrarse,
cree para engañarse.

Y en el intermedio la carcome el tiempo,
la traiciona el alma,
la impulsa el sentimiento,
presa de su propia obsesión.

Dominada por el autoengaño,
da un paso más hacía mí,
Y la imagen forzada termina por olvidarme.

3 comentarios:

Hombre Gay dijo...

Qué bonito es tener el poder de resignificar con palabras lo más indescifrable que tenemos. Me gusta.

Anónimo dijo...

entender lo que nos llega sin permiso
aún sabiendo que es nuestro.
Gracias por compartir(nos)

an dijo...

Hermoso detallallamiento de lo impenetrable, de lo incomprensible.
Besos